jueves, 8 de enero de 2009

LAS CONTRATAPAS DEBERÍAN IR ADELANTE.


Manuel Flores Mora fue periodista, diputado y senador del Partido Colorado.
No tuve la suerte de tratarle personalmente, a pesar de que cuento entre mis amigos a sus hijos Manuel, Felipe y Beatriz. Durante la trabajosa salida de la dictadura, ese viejo tribuno batllista escribió en las contratapas del semanario Jaque, que dirigía su hijo Manolo, que sumó a todas las formas de resistencia que desarrollamos contra la dictadura cívico-militar que enlodó la tradición democrática del país con muerte, terror, torturas y saqueos de ejércitos de ocupación.
Los del golpe del 73, ah actorzuelos de reparto la gran historia, creyeron que después de ellos vendría una era de domesticación y silencio.
Manuel Flores Mora, Maneco para los que le hemos querido, también los combatió con la altura de un hombre honrado y superior, enfrentándoles a una perspectiva de un porvenir en los que ellos no tendrían cabida.
En estos días, pienso en él y en las magistrales contratapas de Jaque que deberían volver a publicarse. Desde su óptica, con sus sentimientos y pensamientos de viejo batllista,  nos ayudaría a pensar mejor.

2 comentarios:

el gato utópico dijo...

Macu:
Recuerdo a Maneco cuando ya bastante enfermo se levantó para hacer uso de la palabra en la Convención del Partido Colorado. En su intervención, Maneco pidió la Amnistía General e Irrestricta para todos los presos políticos de la dictadura.
Por suerte no pudo ver cuando su hijo Manuel, director de Jaque, dirigente de la CBI y posteriormente senador de la República, no solo fue uno de los artífices de la expulsión de Germán Araújo del senado, sino que votó a favor de la impunidad para los torturadores y asesinos, en una de las más oscuras páginas de nuestra historia.
Todo mi afecto para un auténtico batllista, político honesto y agudísimo escritor como sin duda lo fue Maneco Flores Mora.

Anónimo dijo...

Macu, totalmente de acuerdo.
De aquellas famosísimas contratapas de Maneco, tengo dos recuerdos imborrables: el primero, que me enseñó que no todo lo de izquierda era perfecto ni todo lo de derecha deleznable, daba gusto ver como opinaba este hombre del Partido Colorado. Lo segundo, que cuando nadie lo podía nombrar, pidió desde una de sus notas, por la liberación de su ex compañero de escuela, Raúl Sendic.