SOBRINOS Y UN TÍO BABOSO.

                                      Imagen del Teatro Solís, antes del show
                                       Javier Silvera, cantautor uruguayo radicado en Chile
                                    Francisca Valenzuela
                                      Brunito Gadea y Sylvia
                                       Valenzuela a puro piano en La Jacinta, casa de comidas
                                     Javier Silvera en el hotel, recién llegado a Montevideo

Mi compañero y amigo Bruno Gadea, también sobrino de la vida, a veces me hace agarrar unas calenturas espantosas como en la Noche de los Museos y otras, como en las actividades organizadas para el Centenario del Natalicio del Dr. Salvador Allende, me hace sentir orgulloso de él como una tía gorda o un tío veterano.

Esta noche, organizó un show case para la chilena Francisca Valenzuela, con exitoso album debut ¨Muérdete la lengua¨, que tocará mañana miércoles en el renovado Teatro Solís junto a Fernando Cabrera, ese supremo bardo, y a Javier Silvera que exportamos a Chile hace unos años.

Javier es también para mí un sobrino de la vida y del corazón, un flaquito milonguero con ¨voz de otro¨, que aprendí a querer en los años duros de la dictadura cuando era un pibe.

Este día de músicas y recuerdos fue bonito para mí y para Sylvia que los fuimos a ver a un lugar acogedor y cálido, en el sur del sur, que se llama la Jacinta.