A la sombra de todos nuestros muertos, en homenaje a todos los que están vivos y pelean cada día por arrastrar a la tierra los dones más básicos del cielo con el que soñamos, celebro aquí el día de la Constitución de un Frente Amplio sin exclusiones.
El 5 de febrero de 1971, en un acto natural y sencillo, hombres y mujeres de izquierda y progresistas, pero progresistas en serio, acordaron en el Palacio Legislativo, la tan ansiada unidad electoral, programática y política de la izquierda uruguaya.
Hoy que el mundo parece pasar de muchas de las cosas por las que peleamos, reafirmo una vez más aquí, mi condición de hombre de izquierda y de frenteamplista, que en el Uruguay deben continuar siendo sinónimos.
Muchas veces, nos marcaron, nos segregaron y nos apartaron con desprecio por ser lo que somos, lo que seremos siempre. Si algún visitante del blog se molesta, lo siento.
No hay mástil más firme para los sueños que tejo con los demás, que el Día del Frente Amplio, la fuerza política en la que creo y en la que deposito mis esperanzas, a pesar de todo.
1 comentario:
Que así sea. Macu, también yo reinvidico mi condición de frenteamplista. Es cierto, tal como decía Neruda "nosotros, los de entonces... ya no somos los mismos". Muchos compañeros ya no están. Nuestros "viejos" queridos, como vos bien decís, salieron de gira. Mi recuerdo para todos ellos. También vaya mi homenaje para todos aquellos "pendejos" que supimos (pido perdón pero necesito incluirme) mantener la llamita encendida pese a los vendavales que arreciaban. Pero también mi reconocimiento para vos y toda tu generación. Fueron ustedes los que forjaron la unidad de la izquierda en la calle, en las fábricas y en las universidades. Para el final, mi eterna admiración por ese hombre bueno que fue y seguirá siendo el General Seregni. Como bien decís Macu, "la fuerza política en la que creo y en la que deposito mis esperanzas, a pesar de todo."
Qué vivan los Compañeros!
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