domingo, 9 de septiembre de 2007

LA MUERTE, ESA POQUITA COSA



Eduardo Gato Alquinta, guitarra y voz de Los Jaivas






Ovidi Montllor, actor y compositor de la Nova Cancó Catalana




En 1976, un empresario de espectáculos, Carlos Roth, me contrató para hacer la prensa de Los Jaivas, que se presentarían en concierto en el Teatro Nuevo Stella. Inicialmente, desde París llegó Eduardo Parra, uno de los hermanos fundadores de este grupo de rock exiliado en Francia, Recorrimos diarios y radios, preparando el terreno para el desembarco de la banda en Montevideo. Con la llegada de Los Jaivas retomé mi relación con Pajarito Canzani, ese extraodinario compostor fraybentino, devenido en aqella época en bajista y coros de los chilenos, Claudio, Gabriel, Eduardo y el Gato Alquinta.
De todos ellos, el mejor lo tengo de Eduardo Alquinta, guitarrista y voz líder del conjunto, su calidez, su bonhonomía, su talento son cosas que están frescas en mi memoria, por ahora libre del alemán.
Gato Alquinta se murió de un infarto y me enteré de la noticia viendo Tv Chilena un sábado como el de hoy, que no me podía dormir y la noticia me asaltó desde unos de los canales de televisión más flecos de América Latina, que veo sólo para asombrarme de la baja calidad de un medio de un país que se pone a menudo como ejemplo de desarrollo y progresión social.
Eso con respecto a un primer dolor, como de ciática en el corazón, por el Gato Alquinta. a quien conocí y aprecié mucho.
No conocí al Ovidi Montllor, más que por sus canciones y sus apariciones como actor, como segundo de Pepe Carvalho.
Hoy entré a internet y recordé que se cumplen 12 años de su muerte, algo que casi había olvidado, y fue como si de nuevo me quebré por un instante, sintiendo que algo de mí se había muerto en estos dos.
Porque aún estoy aquí, y porque estuve escuchando al Ovidi y porque siempre está el Gatito cantándome ´Mira niñita¨, es que los coloco en este blog, para que aquellos que como yo, los ¨revivimos¨cada día, se acerquen a sus músicas y a sus canciones. Sorry, si estas palabras salen medio cursilonas, hoy estoy con un ánimo de pasillo de hospital, por nada en especial, pero de bajón sin duda.

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